El ransomware, el malware y los virus de espionaje son diferentes tipos de software malicioso que pueden dañar tu ordenador o tus datos. Para evitarlos es necesario tener un buen plan con medidas preventivas.

Tu plan de contingencia debe incluir un buen antivirus y un cronograma para que mantengas tus programas actualizados para protegerte de estas amenazas. También es aconsejable que hagas copias de seguridad de tus datos importantes y que no abras archivos o enlaces sospechosos. Ahora revisemos brevemente cada uno de ellos:

¿Qué es el software malicioso Ransomware?

El ransomware es un tipo de malware que bloquea los datos o el dispositivo de una víctima y amenaza para mantenerlo bloqueado hasta que se pague un rescate. Este tipo de software malicioso puede cifrar todo el sistema operativo o solo algunos archivos.

Luego el ciberdelincuente exige una cantidad de dinero (normalmente en criptomonedas) para proporcionar la clave de descifrado. Definitivamente es una forma de extorsión cibernética que puede causar grandes pérdidas económicas y de información.

 ¿Cómo funcionan los virus de espionaje?

Los virus de espionaje (o spyware) son un tipo de malware que se instala en tu ordenador sin tu conocimiento. Este tipo de software malicioso recopila información sobre tu actividad, tus hábitos, tus contraseñas o tus datos bancarios.

Los virus de espionaje pueden enviar esta información a terceros sin tu permiso, lo que puede comprometer tu privacidad y tu seguridad. Además, este tipo de virus pueden entrar en tu ordenador a través de programas gratuitos, falsas actualizaciones o enlaces engañosos.

¿Qué tipo de software malicioso es el malware?

El malware es cualquier tipo de software que altera o elimina datos sin tu consentimiento explícito. El malware puede infectar tu ordenador a través de sitios web maliciosos, archivos adjuntos malignos o descargas no seguras.

Este tipo de software malicioso puede tener diferentes objetivos, como robar tu información personal, mostrar publicidad no deseada, ralentizar tu sistema o dañar tus archivos. Algunos ejemplos de malware son: virus, troyanos, gusanos y adware.

Recomendaciones para evitar los software maliciosos

Dado que estos virus maliciosos pueden dañar tu dispositivo, robar tu información o interferir con tu navegación, es importante que sigas estos consejos y recomendaciones:

•  Mantén tu sistema operativo y tus aplicaciones actualizados. Así podrás corregir las vulnerabilidades que podrían aprovechar los virus.

•  Instala un buen antivirus y escanea tu dispositivo periódicamente. El antivirus te ayudará a detectar y eliminar los virus que se hayan podido colar en tu dispositivo.

•  No abras archivos adjuntos o enlaces sospechosos que recibas por correo electrónico o redes sociales. Podrían contener virus que se activan al hacer clic. Verifica siempre el remitente y el asunto antes de abrir cualquier mensaje.

•  No descargues ni instales programas de fuentes desconocidas o ilegales. Podrían contener virus ocultos o adware que te mostrarían publicidad no deseada. Usa solo sitios web oficiales y de confianza para descargar software.

Otros consejos

•  Realiza backup de tus datos importantes. Así podrás recuperarlos en caso de que un virus los borre o los cifre. Para tus copias de seguridad puedes usar un disco duro externo o un servicio de almacenamiento en la nube para guardar tus archivos.

•  Usa un navegador seguro y actualizado. Evita entrar en sitios web que no tengan el protocolo HTTPS o que te muestren un aviso de seguridad. También puedes usar extensiones que bloqueen los anuncios y los rastreadores.

Por último, es importante destacar que con más frecuencia de la que querríamos se siguen creando software malicioso con distintos fines. Es por ello que contar con un plan de recuperación de la información es muy importante y obligatorio para cualquier empresa o negocio que dependa de los datos para su funcionamiento.

Un plan de recuperación de la información es un conjunto de procesos y procedimientos que permiten proteger y recuperar la información en caso de pérdida+ como consecuencia de este tipo de ataque cibernético.